1 jul 2011

Capítulo 3.

3
Estoy en mi casa a las ocho y media. He llegado pronto para tener dieciséis años, aunque mañana voy al instituto. Genial, veré  a Azul, mi mejor y única amiga, por penoso que suene.
Me quito los cascos y la sudadera.
Alex, ¿ya estás aquí? Tu padre llegará en un rato… Ve a cambiarte, ¿qué has hecho? es mi madre, ha venido a recibirme.
Nada especial, mamá… Solo me he tomado una palmera.
¿Dónde has estado?
En Sol, mamá…
Subo las escaleras dando la conversación por terminada. Me meto en mi cuarto y cierro la puerta. Dejo la sudadera sobre la cama y comienzo a desvestirme. Sonrío al ver mi mano izquierda. No sé porqué, pero voy a apuntar el número, quizás es falso y lo ha hecho para reírse de mí… Lo más seguro es que no volvamos a vernos nunca. Pero aún así voy a guardar el número. Quizás por la emoción, quizás porque tengo esperanza. ¿Esperanza de qué? No lo sé, ¿quién sabe? Me saco el móvil del bolsillo del pantalón y lo apunto. “Guardar”. Lo guardo con el nombre de Oliver. Es un nombre bonito…
Comienzo a desvestirme y saco el pijama, poniéndomelo. Enciendo el ordenador. Mientras se carga recojo mi ropa y me cepillo el pelo, haciéndome una coleta para estar más cómoda. Pongo la contraseña de usuario, la cual no es difícil de adivinar: «SexyGerardWay». Cuando se carga del todo abro Internet y me meto en Tuenti. Un mensaje privado, tres invitaciones a eventos y una foto con comentarios. Miro el mensaje privado… Es de Azul.

Azul Vega   Hoy, 19:28

¡Besotes!

No puedo evitar sonreír al leer su mensaje. Ella siempre tan activa y siempre contándomelo todo. Decido no contestarla, ya hablaremos mañana.
Rechazo todas las invitaciones a eventos, las cuales me resultan molestas y miro el comentario en foto. Es una foto de una de clase que me cae fatal con el título de: «¿Qué piensan de mí?» ¿Qué qué pienso de ti? Que eres una calienta-braguetas. Que me caes mal, que eres una chula como Vanesa y las tontas de sus amigas y que no entiendo porque me etiquetas en esta mierda. Eso pienso de ti. El comentario, como no, es de una de sus amigas. «¡Qué guapa, guapísima!». Me quito la etiqueta de la foto, ni siquiera sé como he aguantado tanto.
Abro una pestaña y me meto en Youtube, tengo ganas de escuchar música. Pongo Sweet Home Alabama. De repente se me ocurre una idea. Me acuerdo de Oliver… Voy a la pestaña del Tuenti mientras suena la música y pongo “Oliver” en la barra de búsqueda. Me salen más de quinientos resultados… Pongo que es de Madrid, que es un chico y que tiene diecinueve años. Me salen alrededor de cuarenta resultados. Bah, ni idea. Comienzo a pasar las páginas mirando las fotos de perfil, a ver si en alguna sale él. Me sale un montón de gente con el nombre de Oliver Sykes, el vocalista de un grupo. Oigo la puerta, ha llegado mi padre. Me levanto de la silla y voy hacia la puerta de mi cuarto. Oigo que mi madre me llama.
¡Alex, baja a cenar!
Ya voooooy…
Bajo las escaleras y cuando llego abajo veo a mi padre. Sonrío y le doy un fuerte abrazo.
¡Hola papá!
Hola, ¿qué tal el día?
Muy bien, ha hecho bastante frío…
Lo sé se ríe y entra en la cocina.
Nos sentamos todos a la mesa. Un momento…
¿Dónde está Vanesa? pregunto a mi madre.
Se ha ido a dormir a casa de Sofía.
Ah digo simplemente.
Yo alucino… mañana hay clase y dejan que se quede en casa de sus “amigas” cuando yo ni siquiera puedo acostarme tarde.
Cenamos en silencio, con alguna que otra pregunta por parte de mi madre y respuestas monótonas por parte de mi padre. Cuando termino me levanto y dejo el plato en el fregadero.
Me voy a mi cuarto digo y salgo de la cocina sin esperar que me contesten.
Cuando llego a mi cuarto pongo el ordenador sobre la cama y me tumbo. Sigo con mi búsqueda del tío bueno y egocéntrico. Veo uno… Se llama Oliver Disastrous Mind. ¿Oliver Mente Desastrosa? Me río yo sola e intento entrar en su perfil, pero tiene privacidad. Acerco un poco los ojos a la pantalla del ordenador para ver la pequeña foto y… ¡bingo! Esos ojos azules son suyos… Dios, qué guapo sale en la foto. Estoy pensando si debería agregarle… No. No voy a hacerlo. Que me busque él a mí, voy a parecer desesperada… Ahora que lo pienso, mi nombre en Tuenti es Alex Unrestricted. Alex Sin Restricciones. Me río. Puede que tengamos cosas en común.
Apago el ordenador y me meto en la cama. Espero que él me busque a mí. De repente me siento mal… Tiene diecinueve años, casi no nos conocemos. Si mis padres se enteran me matan… y encima seguro que tiene novia. Mayor, más guapa, más perfecta… Y no sé de qué me preocupo. Él y yo no tenemos nada que ver
No volveremos a coincidir, seguramente no volveremos a vernos. Y pensando en estas cosas y en que no me he lavado los dientes, me duermo.









No hay comentarios:

Publicar un comentario